Los dichos de siempre y los que
usan muchos hinchas al final de los partidos, pero con los que claramente
ninguno está de acuerdo, ni mucho menos contento a la hora de escoger alguna de las opciones. ¿Desempeño
versus resultados? Para hacer una pregunta más clara y directa podríamos
plantearlo de la siguiente manera: ¿Qué quieren y cómo quieren los hinchas que
sus equipos jueguen? La respuesta sería aún más fácil o predecible: bonito y
efectivo. Pero es que ni el Barcelona que es una de las demostraciones del Jogo bonito del fútbol mundial en este
momento es tan efectivo como todos quisieran. Así que para el resto, habrá una
diversidad inmensa en el juego, y aun así no es suficiente para satisfacer a
los distintos gustos.
Un buen ejemplo de lo citado
anteriormente es la selección Colombia Sub-20, pues el domingo pasado se alzó
con el trofeo de campeón Sudamericano 2013 (Es su tercer título después de
haber conquistado uno en 1987 y otro en 2005)
sin jugar el fútbol que muchos quisieran, y es más con un fútbol que
también muchos coincidirían deja demasiado que desear. Si hacemos un recorrido
de la participación de la tricolor en este torneo, podría observarse que la
selección fue la más consistente, en la primera fase ganó dos partidos y perdió
dos sumando seis puntos y clasificando antes de jugar el último partido frente
a Argentina. En la fase final su
desempeño en resultados fue aún más sólido, pues de los cinco partidos que
disputó obtuvo los tres puntos en cuatro compromisos (frente a Ecuador,
Uruguay, Perú y Paraguay) y solo cayó derrotado frente a Chile por la mínima
diferencia. Los resultados nunca mienten como dirían por ahí, son claros
concisos y no tienen nada que discutir. Recuerdo muy bien en el partido frente
a Bolivia donde Colombia ganó 6-0, los innumerables comentarios en redes
sociales sobre los otros seis que Jhon Córdoba no marcó, o lo mal que definió
Perea o Cuero, y que pudieron haber sido hasta el doble de goles, o que
simplemente le marcamos seis goles a “nadie”. Me detengo un poco a pensar y
digo, caramba fueron seis, seis goles que dan para utilizar el término
“vapulear”, y a la afirmación “no le
ganamos a nadie” pues ese nadie precisamente fue el que le empezó a dañar el
caminado al dueño de casa, Argentina. Sigo pensando que somos muy inmediatistas
e impulsivos en nuestros comentarios, que creemos que ganar por un solo gol es
menos que ganar por diez, y no nos detenemos a ver toda la perspectiva, al
final los tres puntos siguen siendo los mismos.
Los torneos juveniles son parte
del proceso de formación del futuro de las selecciones mayores, por su misma
juventud son tan irregulares que podemos ver partidos tan buenos como malos, y
eso creo que fue lo que mostró esta selección Colombia Sub20. Retomo un par de
partidos para argumentar que esta sub20 colombiana si tiene un fútbol, el
primer partido con Paraguay mostró tenencia del balón, pases completos y
llegadas claras, ¿Que faltó más definición?, si es cierto, pero las llegadas
estuvieron y bastó un solo disparó de Córdoba para lograr el objetivo. El
partido contra Uruguay, en mi opinión el mejor a nivel táctico, Colombia se
mostró un equipo organizado y estructurado, armando con un Juan Fdo. Quintero
que estuvo súper claro y preciso. Yo vi un equipo bien parado en la cancha y
que de nuevo concretó cuando tenía que hacerlo.
Siempre existirá un mar de
opiniones para elegir al gusto de cada quien, pero siempre hay un deber en
reconocer lo propio, Colombia fue
campeón, y no solo porque no estuvieron ni Argentina ni Brasil (estos no
estuvieron porque no dieron la talla en la cancha, pero ese es otro tema), lo
fue simplemente porque fue la mejor en los minutos que disputó en la cancha,
consiguiendo los resultados que tenía que conseguir, y claro acompañada de la
suerte del campeón que no podemos negar siempre estará presente. El proceso de
estos veintidós juveniles seguirá en manos del Piscis Restrepo quien tendrá que
ver lo jugado para ir afilando ese fútbol que se vio por momentos, para que
eventualmente sea una constante.
Así que ustedes elijan si quieren
seguir utilizando la frase “jugar como nunca y perder como siempre” o al revés,
o simplemente confiar en el trabajo, el
proceso y el talento de los muchachos para con que un poco de suerte los
resultados pudieran acompañarnos siempre. Muy bien dicen que en el fútbol goles
son amores, así mismo resultados y campeonatos son los que ponen en los
escalafones a los diferentes equipos. Reitero mis felicitaciones a esta
selección Colombia sub20, que si bien no desplegó glamour futbolístico, si se
le vio ganas, trabajo en equipo y lo que habla por sí solo, un nuevo campeonato
sudamericano para el país y el cupo asegurado al mundial de Turquía 2013.